Es mentira, Estados Unidos no es un país de Inmigrantes

August 16, 2015

Lo primero que hace un socialista en una discusión es sacar del bolsillo de atrás del pantalón la libretita en la que ha apuntado lo que tiene que decir: datos absurdos y estudios poco serios como prueba de que el socialismo es lo mejor para todos los pueblos. Como la fuente de las cifras no está a la mano y ponerse a investigar a fondo lo que está diciendo para refutarlo no da tiempo en esa discusión, esta posiblemente sea la estrategia más útil para tener la última palabra.

Pero cuando eso no funciona, los socialistas hacen un esfuerzo e intentan ofrecer argumentos. El argumento en el caso de la inmigración es uno solo y siempre el mismo: Los países más prósperos del mundo son países de inmigrantes como EEUU. Si se les presiona pueden combinar el primer argumento con el segundo: todos en EEUU son inmigrantes, excepto los indígenas”.

Suena muy bien, sí, pero Estados Unidos no es un país de inmigrantes. Estados Unidos ha recibido millones de inmigrantes de otros países eso sí es cierto, en especial a partir de 1965 después de que se adoptara el “Immigration and Nationality Act” de Ted Kennedy, pero eso no significa que es un país de inmigrantes o que le deba su prosperidad a ellos.

EEUU fue creado, fundado, y poblado por británicos protestantes que eran en una gran mayoría ingleses aunque hubo también colonos escoceses e irlandeses. A excepción de un importante grupo de alemanes, los colonos hablaban en el mismo idioma, eran de la etnia inglesa, y tenían una cultura homogénea.

Los firmantes de la Declaración de Independencia eran también descendientes de británicos y por eso conocían bien a Locke y la filosofía de la Ilustración inglesa que fue el fundamento de las ideas de la Revolución Americana. No sólo fue inspirada en lo filosófico: el sistema de derecho que implantaron en América fue también británico: que el “common law”, distinto al derecho romano de las colonias españolas y portuguesas.

El país que fundaron los colonos americanos, por lo tanto, es una rama de la civilización británica. Por eso se parece a todos los países del Commonwealth. Las instituciones americanas son herederas de las británicas, su sistema de derecho es británico, sus tradiciones son británicas, EEUU tiene una esencia étnica y cultural definida, que no es diversa ni fue construida “por inmigrantes”.

Conviene aclarar dos puntos: el primero es que un inmigrante y un colono no son lo mismo. Un inmigrante es una persona que llega a un sistema que existe antes que él llegara. El inmigrante llega a un país que ya existe y se acomoda a él (o no). Un colono no es eso. El colono llega a un territorio en el que no hay un sistema, y lo construye. De manera que los colonos americanos en nada se parecen a los inmigrantes italianos que llegaron en los 70, por dar un ejemplo. El puritano inglés que fundó la colonia de Nueva Inglaterra en lo que previamente era un descampado se parece poco a Jesús, que llegó anteayer de Chiapas y se metió a jornalero.

También hay que aclarar la diferencia entre un territorio y un país. Los colonos británicos no fueron “inmigrantes” que llegaron a América a desplazar (o “masacrar” ya depende de la intensidad del socialista) a los indígenas. Los colonos llegaron a un territorio en el que lo único que había era tipis indios, y fueron ellos quienes fundaron lo que hoy conocemos como EEUU. Si no fuera por la colonización británica, en EEUU se seguiría viviendo en tipis, el sistema seguiría siendo tribal, los intercambios seguirían siendo por medio del trueque y el mayor avance tecnológico sería el cultivo rudimentario del maiz. Un inmigrante es una persona que llega a un país que ya está constituido. Los colonos no son inmigrantes.

Los colonos americanos llegaron a un territorio que solía ser de los indígenas y construyeron en él algo radicalmente nuevo y propio: un país. Construyeron en él una sociedad próspera con instituciones sólidas, valores protestantes, con un Estado de derecho, una moneda, y continuaron desarrollando su sistema hasta hoy. Un sistema que les pertenece, que nació de sus costumbres, de sus creencias y de su modo de vida, un sistema en esencia británico, protestante, blanco.

En resumen: EEUU no es un país de inmigrantes. Es un país que hasta 1965 era prácticamente homogéneo y constituido principalmente por europeos blancos y protestantes del norte de Europa occidental. A partir de 1965 ha recibido una inmigración masiva, olas de inmigrantes de todo tipo, sin discriminar, que están poniendo en riesgo el sistema. Si la inmigración continúa dentro de poco EEUU dejará de ser un país blanco/protestante/inglés y se convertirá verdaderamente en un país de inmigrantes. Cuando eso ocurra primero cambiarán los valores, después cambiará el idioma, y finalmente la cultura. El sistema se vendrá abajo cuando su esqueleto, que es la cultura que lo produjo, desaparezca.

Una sociedad no es un cúmulo de personas. Poner a un grupo de personas dentro de un territorio no los transforma en una sociedad. Poner un puñado de culturas dentro de un mismo espacio no produce un país. Una sociedad está conformada por personas, pero esas tienen lazos entre sí, cooperan, porque tienen un origen compartido y una idea destino común. Eso sí es una sociedad, y por eso las sociedades prósperas en todo el mundo suelen ser sociedades étnicas en las que todos los miembros se sienten como parte de una misma cosa. Mientras más inmigrantes hay, mientras más grupos de interés diferentes se mezclan en una misma sociedad, más débil es.